La alimentación infantil es una pieza clave para el correcto desarrollo y crecimiento de los niños. Su nutrición está basada en diferentes fases según la edad de los pequeños. Esto significa que el primer alimento que se da a los bebés es la lecha materna y según van creciendo se van introduciendo otros alimentos a su dieta. Es importante recordar que la alimentación de nuestros hijos debe ser sana y equilibrada, es decir, deben comer frutas, verduras, cereales, carne y pescado, entre otros. Aunque al principio puede que le cuesta comer algunos alimentos tales como frutas y verduras, es esencial que las coman ya sea en purés o enteras. Otra opción es intentar que coman aquellas que son de su agrado. Precisamente, una de las frutas favoritas de los más pequeños son las naranjas y las mandarinas. Sin embargo, cítricos como el limón o el pomelo no suelen gustar a todos por su sabor ácido. En este post, os queremos explicar la importancia que tienen las naranjas y las mandarinas en la alimentación de nuestros hijos.
Como ya se sabe, las naranjas y las mandarinas tienen un alto contenido en vitamina C lo que significa que son cítricos que intervienen en la formación del colágeno. Del mismo modo, ayudan al correcto crecimiento de los huesos y dientes. También hay que recordar que ambos cítricos favorecen la absorción del hierro de los alimentos y aumentan las defensas. Por tanto, las naranjas y mandarinas contribuirán al correcto crecimiento de los más pequeños. Recuerda que los cítricos se empiezan a incluir en la dieta de los bebés a partir de los seis o doce meses mediante los potitos. A medida que van creciendo, les podemos hacer zumos de naranja naturales o darles los gajos de mandarina enteros.
Incluir naranjas en la alimentación infantil es esencial ya que proporcionará innumerables beneficios a la salud de los más pequeños. Destaca por su escaso aporte en calorías y por su alto contenido en agua así como en vitaminas y minerales. Gracias a sus propiedades antioxidantes, ayudará a prevenir y evitar las enfermedades cardiovasculares y degenerativas. También contribuirá al buen mantenimiento de la visión, de la piel, de los huesos y del sistema inmunológico. Os recomendamos dársela a media mañana, para merendar o como postre. Podrás optar por dársela en un potito mezclada con otras frutas, en zumo o en gajos.
Por otro lado, las mandarinas también juegan un papel esencial en la alimentación infantil. Una de sus grandes ventajas es que son más pequeñas y fáciles de llevar en la mochila para que tus hijos se las coman en el recreo. Las mandarinas destacan por su alto contenido en agua así como en vitaminas, minerales e hidratos de carbono, entre otros. Asimismo, poseen propiedades antioxidantes lo que significa que actuará frente a los radicales libres para proteger al organismo de las enfermedades degenerativas y cardiovasculares. Recuerda que la mandarina es depurativa y que tiene un alto contenido en fibra al igual que las naranjas. Esto significa que evitará el estreñimiento entre los más pequeños.
Gracias a su sabor dulce, las mandarinas y las naranjas son una de las frutas favoritas de los más pequeños. En Eco-Citric disponemos de naranjas y mandarinas ecológicas de excelente calidad y sabor. Este tipo de cítricos son más saludables para nuestra salud ya que no contienen ningún agente químico dañino para nuestro organismo. Además, tienen un sabor y aroma mucho más intenso.