- 1 masa quebrada o masa brisa (30 cm. de diámetro)
- Para la crema de limón: 2 huevos y 4 yemas
- 350 g. de azúcar blanco
- 80 g. de almidón o harina de maíz fina (Maicena)
- 40 g. de mantequilla
- 200 ml. de zumo de limón (4-5 limones)
- 50 ml. de agua
- Ralladura de un limón
- Para el merengue italiano: 4 claras de huevo
- 50 g. de azúcar
- 50 ml. de agua + 100 g. de azúcar
- 1 pizca de sal
(tarta de limón y merengue), ya que combina una crema de limón con una buena capa de merengue. Esta combinación es equilibrada, y el sabor fresco y ligeramente ácido del limón compensa la dulzura y contundencia del merengue.
Primero se hace la base con masa Quebrada o masa Brisa, luego le añadiremos la crema de limón y tras unas horas en frío, tocará el turno de aplicarle el merengue.
1. Preparamos la masa brisa y la colocamos en el molde
- Precalentamos el horno 15 minutos a 180º C.
- Colocamos la masa sobre un papel de horno y la pasamos al molde metálico, ajustándola al mismo. Recortamos si nos sobresale, y pinchamos la base de la masa con un tenedor, para que así no se hinche una vez en el horno.
- Colocamos en la bandeja central y horneamos 15-20 minutos a 180º C, hasta que veamos que está tostada/dorada. Más tarde, acabará de hacerse con el resto de ingredientes. Retiramos y dejamos que enfríe completamente, ya fuera del molde.
Cómo hacer la crema de limón base del Lemon Pie.
- Rallamos un limón y reservamos la ralladura. Exprimimos 4-5 limones, para obtener unos 200 ml. de zumo. Ayudaos de un colador para que no os caigan las pepitas. Añadimos 50 ml. de agua al zumo, mezclamos bien y reservamos.
- Separamos de 4 huevos, las yemas de las claras, y éstas las reservamos en la nevera para hacer más tarde el merengue. En un bol, batimos 2 huevos y 4 yemas hasta que blanqueen. Añadimos poco a poco el azúcar y vamos mezclando bien con unas varillas.
- Echamos ahora la harina de maíz y seguimos mezclando, hasta que sea una crema bien homogénea.
- En una cazuela que no se pegue, echamos el zumo, la mantequilla en trozos y la ralladura de limón. Calentamos a fuego medio y dejamos que se derrita la mantequilla. Bajamos el fuego, añadimos la mezcla de huevos y vamos removiendo sin parar. Poco a poco veréis como va espesando y se forma una crema suave de color limón.
- Con la base de masa ya fría, la volvemos a colocar en el molde. Vertemos la crema de limón, repartiéndola uniformemente, y alisamos la superficie con la ayuda de una espátula.
- Ahora necesitamos meterla en frío para que coja textura y consistencia. Dejamos que se atempere, tapamos con un film transparente y reservamos en la nevera unas 2 horas.
El merengue italiano
- Una vez pasado el tiempo de frío, toca el turno de hacer la capa superior de la tarta. Como tenemos que montar claras, es recomendable que usemos un robot de cocina o una batidora con varillas, si no os vais a dejar el brazo en el intento.
- La particularidad de este tipo de merengue es que lo hacemos con almíbar, que preparamos en la proporción: doble cantidad de azúcar que de agua.
- En un bol grande, echamos las claras reservadas y las montamos junto a 1 pizca de sal. Cuando estén casi montadas, añadimos poco a poco 50 gr. de azúcar y seguimos batiendo. Cuando estén prácticamente listas, paramos y reservamos mientras hacemos el almíbar.
- En un cazo ponemos el agua a calentar a fuego medio, añadimos el azúcar y removemos hasta que se disuelva. Subimos el fuego y llevamos a ebullición, sin remover. Tendremos cuidado de que no se cristalice en los bordes del líquido, en la parte de la superficie.
- ¿Y cómo sabemos en qué punto está en la textura deseada? Pues una de las maneras es usar el extremo redondo del mango de nuestras varillas. Cogemos un poco de almíbar, soplamos y si se hacen pompas, ese es el punto idóneo.
- Otra manera es echar un poco de almíbar en agua, y comprobar que se forma una bola. Para los que tengáis termómetro de cocina, el punto que queremos es cuando alcance los 120º C de temperatura.
- Listo el almíbar, lo vamos añadiendo (caliente) al merengue poco a poco con un hilo fino, al mismo tiempo que seguimos batiendo. Una vez terminado, continuamos hasta que se enfríe. Resultará con una textura brillante y bien consistente.
Montaje de la tarta de limón. Presentación final
- Pasamos el merengue a una manga pastelera y con una boquilla rizada. Vamos haciendo pequeños montoncitos de merengue por todo el contorno, de fuera hacia adentro. Con un poco de destreza, hacemos que queden puntiagudos.
- El toque final será de nuevo en el horno. Colocamos la tarta en la bandeja central. Horneamos con la función calor “arriba y abajo”, unos 10 minutos a 180º C, hasta que el
- merengue comience a tostarse.
- Es importante que no le perdáis ojo, para que no se queme demasiado, y nos queme poco presentable nuestra tarta. Queremos que se cueza, no que se chamusque, por lo que es mejor hornear que quemarlo con un soplete.
- Retiramos del horno y dejamos que se atempere, para que asiente de nuevo el merengue en la crema.